No revisar las exclusiones de la póliza: el error más común que puede perjudicarte
 

Cuando contratamos un seguro, solemos enfocarnos en el precio, en las coberturas principales y en la rapidez del proceso. Pero hay un elemento clave que la mayoría pasa por alto y que, lamentablemente, es una de las razones más frecuentes por las que un siniestro puede ser rechazado: las exclusiones.
 
¿Qué son exactamente las exclusiones?
 
Las exclusiones son situaciones específicas que la aseguradora no cubre, incluso si tienes una póliza activa y al día. En otras palabras: son escenarios en los que, aunque sufras un siniestro, la compañía no está obligada a indemnizarte.
 
Están detalladas en el contrato y varían según el tipo de seguro (auto, hogar, salud, vida, etc.).
 
Ejemplos comunes de exclusiones (según tipo de seguro)
 
Aunque cada compañía tiene sus propias reglas, estos son algunos casos típicos:
 
Seguros de auto
            •           Conducir en estado de ebriedad o bajo sustancias.
            •           Participar en carreras, competencias o eventos no autorizados.
            •           Usar el vehículo para fines comerciales si la póliza es particular.
            •           Conducir sin licencia o con permiso vencido.
 
Seguros de hogar
            •           Daños por mala mantención o instalaciones defectuosas.
            •           Inundaciones por filtraciones antiguas no reparadas.
        •         Robo sin evidencia de fuerza o sin medidas mínimas de seguridad.
 
Seguros de salud
            •           Tratamientos estéticos o no médicos.
            •           Condiciones preexistentes no declaradas.
            •           Accidentes ocurridos en actividades de alto riesgo no informadas.
 
Seguros de vida
            •           Suicidio dentro de los primeros años de vigencia.
            •           Actividades peligrosas no informadas (deportes extremos, trabajos de riesgo).
 
 
¿Cómo evitar sorpresas al momento del siniestro?
 
Aquí van recomendaciones prácticas para protegerte:
 
1. Revisa tu póliza al contratar
 
Dedica unos minutos a leer las exclusiones. Si algo no entiendes, pregunta.
 
2. Pide que tu corredor te las explique
 
En Davidson Eltit siempre te indicamos cuáles son las exclusiones más relevantes y cómo evitar caer en ellas.
 
3. Actualiza tu póliza si tus condiciones cambian
 
Si comenzaste a usar tu auto para trabajar, si te mudaste, si compraste nuevas pertenencias, ¡actualízalo! Cambios no informados pueden afectar tu cobertura.
 
4. Mantén registros y documentación
 
Muchas exclusiones están relacionadas a mantención, licencias o normas. Tener la documentación al día puede evitar rechazos.
 
5. No supongas: confirma
 
Un siniestro es el peor momento para enterarte de que algo no estaba cubierto.
 
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En Davidson Eltit, siempre te acompañamos para entender tu póliza, revisar tus condiciones y evitar rechazos innecesarios.
Tu seguridad no es un trámite: es nuestra prioridad.
 
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